La ciudad de Querétaro como todo lugar colonial guarda secretos, hechos históricos que hoy se han vuelto leyendas. Desde el comienzo de esta, los actores han dado vida a diversos personajes característicos del estado, se dice que sus iniciadores fue la familia Rabell, dueños del Corral de Comedia, quien bajo la batuta de don Paco y Luis su hijo, contaban la historia en forma teatral para posteriormente dejar la dirección a José Niembro quien por muchos años representó magistralmente los relatos del Querétaro del ayer.
Hoy en la capital están registrado 5 grupos que cada fin de semana se ubican en el Templo de San Francisco, el andador 5 de Mayo, el andador Libertad y Plaza de Armas, hasta donde llegan los turistas para escuchar la leyenda como:
DON BARTOLO: El usurero que vendió su alma al diablo para tener poder y mucho dinero.
LA ZACATECANA: Leonarda Martínez a quien se le atribuye el envenenamiento de Benito Juárez y Benito Zenea por haberle matado a su gran amor.
LA LLORONA: Personaje que a pesar de ser conocida en diversos estados, la queretana tiene su historia y se dice que corría por todo el Río de Querétaro el cual dividía a la otra banda y era el terror de los trasnochados con sus escalofriantes lamentos.
EL SERENO SIN CABEZA: Al que se dice que mataron en una de las batallas entre los jóvenes del centro y los de la otra banda.
EL MARQUÉS DE LA VILLA DEL VILLAR DEL ÁGUILA: Al que se le debe la construcción del acueducto, un acto realizado por el gran amor a una monja.
CHUCHO EL ROTO: Jesús Arriaga, quien era el Robin Hood queretano pues ayudaba a los pobres robándole a los ricos y del que se rumora tuvo sus quereres con la Carambada.
LA ZACATECANA: Una guapa y distinguida dama de la época, que por avaricia, hizo que sus manos se mancharan de sangre.
Un recorrido imperdible que hace que la historia se vea de otra manera.