En el kilómetro 200 de la carretera a Tequisquiapan, tras andar unos metros en terracería, se erige en el paisaje campestre una finca de grandes dimensiones. El Consuelo se convierte en protagonista de fotos y videos de quien ha tenido la fortuna de llegar a ese punto del camino, se trata de un recinto para celebrar eventos rodeado de su imponente su arquitectura.
Al cruzar las imponentes puertas de la finca se comienza a experimentar una sensación de asombro ante tal construcción. La obra es moderna, pero está completamente basada en las antiguas haciendas virreinales, algunos visitantes no notan esta particularidad.
Cuenta con un camino marcado por el viñedo que forma parte de las amenidades para disfrutar del espacio. El camino concluye en el ingreso al edificio, un salón con una fachada que asemeja a una antigua iglesia. Los pasillos conducen a las diferentes salas y terrazas de las que se podrá disfrutar para los diversos tipos de eventos.
En su patio principal, coronado con una fuente, es posible sentir como si se disfrutara de una fiesta en épocas de la Colonia; las caballerizas rodean esta zona y agregan un toque campestre al entorno.
Los amplios jardines posteriores visten el lago y la casa de la finca. Se trata de una extensión ideal para eventos al exterior, cuenta con zonas arboladas y fuentes.
Uno de los lugares más especiales de El Consuelo es su bar, una mesa de billar y un gran librero decoran este espacio en el que los grupos de amigos disfrutan de hacer sesiones de fotos. El estilo clásico genera una atmósfera única en este espacio.
Es en el bar donde existe un ingreso a la cava, una puerta oculta da acceso a un pasillo descendente que culmina en una elegante cava, ahí se podrá disfrutar de una copa de vino acompañada de un buen puro.
